viernes, 14 de agosto de 2015

ENRIQUECER "CACHOS DE VIDA"


Contemplo la foto que tengo en la pantalla del ordenador. Repaso la escena que representa, las cosas y las personas que están congeladas en la pequeña ventana informática. Pienso en el tiempo que ha pasado y todas las cosas que se me han borrado de la memoria, y temo que pronto no me quede nada en ella. Y entonces serán imágenes fantasmas sin ninguna información que las acompañe contando sus historias y justificando el por qué de sus presencias. Pasado el tiempo, para la gente serían inciertas adivinanzas de quién es quién o se parece, pero no lo es.

 Y empiezo a soñar con la colaboración de algunos seguidores y visitantes que tengan algo que aportar a CACHOS DE VIDA: algún dato para añadir a la foto, algún nombre o fecha, alguna cualidad de las personas o algún episodio,  reflexión o pensamiento. Sería completar con palabras la historia gráfica de treinta años de la historia de Don Benito. Sería darle el valor de la verdad a las imágenes, y demás, quedando constancia escrita.

Y sigo soñando que todo el que tenga algo que decir, lo diría con total libertad en espacio reservado en cada entrada para los comentarios. Sin identificarse, identificándose o como anónimo. Estoy seguro que en las mil y pico de entradas y fotografías se puede aportar algo. Y así hasta convertir este blog en una especie de Wikipedia de libre acceso para todo el que desee consultar algo en relación con las fotos publicadas y con lo que representan. Y con la única condición del mayor de los respeto con las personas y sus opiniones. En la seguridad que en nuestro ánimo no es estar ni entrar en polémicas. Para eso, éste no sería nunca el espacio indicado.

De vosotros, queridos  visitantes, depende que esta idea siga siendo un sueño o el principio de una feliz aventura que dejara para la posteridad nuestros recuerdos en este espacio que tan generosamente nos ofrece las modernas tecnologías. En un blog de viejas fotos, con lo que fue nuestro pueblo y su gente, durante algunas décadas del siglo pasado.

Antes de quitar la imagen de la pantalla del ordenador,  pienso si me ha quedado algo por decir, y si soy un inconsciente por atreverme a darle a publicar esas cosas que uno desea que ocurrieran en la realidad y no solo en la fantasía de un iluso soñador.

Pensar, he pensado muchas cosas; decir, no sé si he dicho algo coherente. La verdad que, en el fondo, me daría mucha pena que ocurriera lo que he soñado, porque llegarían muchos comentarios y no tendría fuerza ni tiempo para contestarlos todos. Ahora, sin embargo, disfruto enviando ilusiones e intercambiando sueños a mis amables comentaristas y visitantes, siendo de ellos el blog tanto como mío, por sus constantes muestras de cariño y solidarías atenciones.

¡Es maravilloso que las nuevas tecnologías nos puedan unir tanto a los seres humanos!

Si lo pienso, no escribo; si repaso lo escrito, no lo publico; así que lo doy a publicar y que Dios nos coja confesados.